viernes, 9 de febrero de 2018

Últimos relatos Una Pag Machines Parte 1





En esta entrada se realizará una publicación de una transcripción textual de una entrevista realizada por parte de la arqueóloga, Francy García, y la antropóloga, Andrea V. (a cargo de la Antropóloga Ana María Groot) responsables del estudio para el informe del plan de manejo arqueológico (que es un prerrequisito para lo que se vaya a hacer al petroglifo, ya sea, reinstauración, imposición de alguna estructura, esto se lo hace, junto con la profesora Ana María Groot, que ella, ha trabajado durante cerca de unos 40 años de investigación y estudios por acá) de los petroglifos “la piedra de los machines” en el resguardo de Cumbal y “la piedra de los monos” o “peña de los monos” en el resguardo de Mueces. Ese estudio va dirigido al Instituto Colombino de Antropología e Historia (ICANH).


Éste blog no se hubiera podido publicar sin la colaboración del compañero Jóse Salomón Cuaical, por el acceso del audio realizado el 4 de octubre de 2017, en la casa del cabildo del Gran Cumbal.

Anoto, que ha habido muchos estudios, como lo cuenta taita Paguay, casi que cada año, lo vienen a traer para que explique, a veces lo llevan a Pasto, y uno de los trabajos que cierta parte aparece en la web es el resumen del proyecto de la institución universitaria CESMAG, proyecto encabezado por el licenciado en física Armando Jose Quijano Vodniza, profesor de la universidad de CESMAG.


Esta es una narración por parte del taita, Julio Cesar Paguay Chinguad (66 años, de Tasmag-Machines), sabedor sobre como estuvo constituido su estructura, topográfica, geológica y topológicamente en lo posible, antes de empezar la explotación de piedra para uso de triturado y rajón, en la construcción artesanal de estructuras en mampostería.


Dice taita Paguay, “yo vengo desde 1965 para acá, los dueños del terreno ya la tenían vendida toda, hubo problemas, algunos salieron lesionados la cabeza, decían que la vendían al banco cafetero, ya estuvieron para bajarla. Con el señor que es de ahí de la mina de explotación de la piedra, decía que la quería acabar, con el decir que, “esa piedra vieja no sirve para nada””.


Nuestros mayores, en verdad, si han luchado y si han dejado, nosotros también hemos pasado por el cabildo, y hemos hecho lo que hemos podido, aunque en mi tiempo, cuando yo estuve de regidor, en ese tiempo, no había la explotación de las minas de piedra, y aún no estaban destruyéndolo, y se la veía como era antes, porque antes eso era bonito.


En el 1960, había cabildos que hacían la fiesta de las flores, de las semillas, porque se iba a ofrecer, a ofrendar semillas, a la piedra (debajo de dolmen u observatorio), empezaban desde el 18 hasta el 22 de junio, era muy bonito mientras se realizaba la fiesta de corpus Cristi, y luego como se acabó, ya no se hace nada. Aunque algunos si certifican que así era, pero otros no, porque en ese tiempo poca atención se les prestaba a estas cosas, no había interés. 


Yo me acuerdo en el 60 (1960), eso era bueno, la fiesta con el cabildo, había cabildos que le hacían la fiesta y cabildos que no, me acuerdo, porque mi papá fue gobernador, y desde pequeño tengo recuerdos, porque vivimos ahí, por cierto, me acuerdo que era cuidadorcito de ovejas, de algunos 7 años, sabíamos salir a los mortiños, dejábamos las ovejas en el camino, y nos íbamos a los mortiños (risas).


En aquellos tiempos del 60, eran 6 veredas (Guan, Tasmag, Cuaical, Quilismal, Cuetial y Cuaspud), pero de ellas eran sólo tres veredas las que acababan corpus Cristi, eran, Guan, Tasmag y Quilismal; entonces, cuando tocaba o caía un gobernador de alguna de estas tres veredas, hacían las fiestas ahí, pero cuando cambiaba el gobernador a Cuaical, Cuetial o Cuaspud, a ellos no les interesaba, porque ellos no acababan la fiesta, cuando el cabildo hacía la fiesta, entonces los gobernadores, aportaban con la presencia, pero con nada más. Entonces, pasa que ahí los fiesteros, se acostumbraba a hacer chicha, champus, y la boda, sabíamos decir nosotros. Entonces el cabildo se trasladaba a la piedra, para la entrega de los fiesteros viejos a entregar la fiesta a los fiesteros nuevos, se colocaban al frente de la piedra, en ese entonces, los fiesteros tenían danzantes (todos hombres, con algunas excepciones de que a veces había mujeres), de bombo y flauta, entonces en ese tiempo, no había casa de cabildo como ahora se la tiene, entonces era arrendando donde la finada alegría Valenzuela o sino, donde don Alcides Cuaical, en esas dos casas era que se reunía el cabildo. Entonces iban a entregar el cargo allá a la piedra, antes era de ir acabar de tomar y bailar a la casa de cabildo. Ahí, entonces, cuando el gobernador del cabildo era de acuerdo con el alcalde, entonces, venían a acabar la fiesta aquí al pueblo. Entonces ahí, al frente de la piedra en una media terraza se colocaban los danzantes, entonces ahí era lo que sabía haber, decían el pegamula, el poscrisios, mijo el taladra, salía con una escudilla, botando champus ahí en el puente, así, era la fiesta. 


Entonces, como le decía, ofrendaban allá, eran las flores o las semillas (pero también iban a dejar las varas del cabildo); entonces, con las flores en el ritual, hacían un círculo los fiesteros, como al frente de la loma era un plan, oca, haba, olloco, papa, todo lo que se daba; el resto de la boda era, cuy, conejo, gallina, cerdo, y ganado, eso colocaban en unas bateas, chicha, champus, porque decían que la piedra era la que daba, porque le tenían mucha fe. 


Entonces, quien vino a acabar la fiesta, en ese entonces, diciendo que no, que nosotros acabemos la fiesta, que ya votemos eso, que eso era un ejercicio tonto, les decían a nuestros antiguos, nuestros ancestros, y pasó, que el finado Padre Bernardo acabo eso, - ¿Por qué?, porque, el cabildo no desenlutó el cabildo a la virgen, aquí en el pueblo, en tiempo santo. Desenlutar, era, quitarle el manto negro, alguien (un niño o niña o joven) se disfrazaba de ángel y ese ángel venía y se llevaba ese manto, y entraba con un manto blanco. Entonces pasó que, ese día hubo un aguacero tremendo y granizó, entonces el cabildo se puso a tomar en la casa del finado Humercindo, ahí era un estanco, y ahí era que hacían el acto, cuando ya el padre salió con la procesión, el cabildo estuvieron borrachos (risas), entonces ya no aceptaron, ni el gobernador ni los regidores, pero nosotros (la comunidad) tuvimos la cerita de invitados, pero en ese tiempo era exigido que el cabildo tenía que, ir adelante en la procesión, y “yora ya nostuvo”, entonces se enfureció el padre. El padre ya los había mandado a llamar con los regidores, que, ¿por qué?, porque hasta ese tiempo, el cabildo tenía la responsabilidad de brindar las fiestas a la comunidad, y si no, acababa el año de cabildante y quedaba fiestero. Entonces pasa que, se quitó todos esos trabajos, porque el cabildo junto con su gobernador de acordar las fiestas, salían en tiempo santo, con las potencias a recoger limosna para la semana santa, para noviembre también, sabían salir a recorrer para las ánimas, y todo eso era responsabilidad del cabildo, para ir a traer las hostias a Pasto, tocaba preparar la iglesia para el padre, a barrer la iglesia, a buscar un limosnero.


En el mes de mayo, que andaban, y tocaba ir a buscar a los viejos rezanderos para cantar la aurora a las 4:00 de la mañana, eso también era responsabilidad del cabildo, entonces, como le hicieron esa, se enojó el padre, entonces se quitó eso. 


Entonces apareció el doctor (es un decir a los profesionales) Bolívar Ruano, era el defensor de los indígenas, entonces él lo que dijo fue, “ustedes que están obedeciendo al cura quítense de eso, si eso no es, pues que trabaje si quiere comer”, entonces, el cabildo ya no fue a andar buscando barrenderos, campaneros, ni nada de eso, si no, el pobre regidor junto con el gobernador, comprar un poco de pan y comprar aguardiente, y andar diciendo, usted está bueno para fiestero, deme acabando la fiestica, así fue que eso se acabó; no ve que había tanta fiesta, había la del Corpus Cristi, la de san Pedro, la de la virgen de la Mercedes, Natividad, Presentación, Inmaculada y noche buena. Entonces a esa vez, se quitó eso, con el doctor Bolívar Ruano. 


Entonces se siguió un pleito duro, eso empezó en abril, de ahí vino corpus, como una semana después no más empezaba corpus, paso que el padre ya no dio la misa, entonces los fiesteros, en ese tiempo más humildes, nuestros mayores, corre con unos agrados, “vea por dios, padrecito” (hincaditos), “denos la misita”. Entonces que ha dicho que no el padre, “que venga el tal gobernador, para vez de que, hablar con él, fue un día lunes, me acuerdo, y los festeros llegaron a la casa de mi papá, dijeron, vea, pordios,(por favor) señor gobernador acompáñenos, ya tuvimos el agrado para llevarle al padrecito, dijeron, a nosotros ya no nos recibió, quizás con usted”.



Figura 1. Petroglifo de los Machines Cumbal, taitas autoridades espirituales (arriba Carlos Chalparizan y el otro no se). Fuente fotografía del diseñador Carlos Puerres. ver link

Entonces, en ese tiempo eran, el finado Floro Alpala era un fiestero, el otro fiestero, creo que el finado José Manuel Chiran, el otro era don Diógenes Paguay y don Rafael Taimal. Entonces, que pasa, ya no nos hizo sentar, así en un banco que tenía, de esos antiguos, ya salió el padre, había estado desayunando, salió bravísimo, con el gobernador, “¡Ah…!”, dijo” indio tal y cual (#$&/?), horasí, has llegado, así te quería ver. – ¿Porqué? le dijo al padre, yo estoy cumpliendo con lo que me toca, el padre le dijo, “no estuviste en la procesión”, entonces él le replico, “pues ahí estuvo la comunidad, mi persona no pudo estar, faltó, pero la desenvitada (invitada) si se hizo, y ¿por qué tanto es el capricho padre?” los mayores también, ya se enojó, entonces el padre dijo, aquí tuvimos que darnos, entonces mi papá (José María Paguay, gobernador del cabildo), le respondió, “¡entonces, demonós!”, ¡entonces que! Dijo el padre y al gobernador, ya lo encuelló, entonces mi papá dijo, usted también es hombre, yo tan son hombre, entonces péguemonos, entonces, pégueme de primero le dijo (risas), entonces, que el padre, como ya lo tenía encuellado de la ruana, el padre levantó la mano y tas, le pegó (ahí si no vi, si sería la mano cerrado o chirlazo no más), pero le pegó a mi papá, entonces mi papá también, levantó la mano y tas, que jodis (joder) maricón (risas), ¡éla! dijo, y se pusieron a pelear, y cuando se armó un alboroto, y ya llamaron a la policía y lo encarcelaron a mi papá, lo tuvieron dos días, hasta que vino el defensor (de indígenas) don Bolívar Ruano de Pasto y de ahí lo sacaron, entonces ya vino y lo sacó y se siguió el pleito. Elay, ahí ya no quiso dar misas, ya no quiso nada, ni tampoco quiso saber nada, el cura le dijo, “vos no sos católico” y mi papá le respondió, “yo no soy católico, los que son católicos son los que están puesto esa follera” le dijo, “yo soy un creyente no más de la biblia”. Como antes se ponían sotana para andar por cualquier parte, donde quiera que vayan.


Yo, le dijo al padre, yo de aquí no estoy buscando fiesteros, usted verá como se arreglen, no tengo que ver nada de eso, y así lo cumplió y después con no ir no más a la misa, tenía (en 1960). Entonces desde eso se acabó las fiestas, el ir a ofrendar a la piedra de los machines, en ese tiempo era fiestero también, don Benjamin Cuaical, entonces, en esa vez, los fiesteros del corpus cristi, todavía bailaron y festejaron, todo, pero ya no con él padre. Entonces como ya se anularon las fiestas con el padre, entonces ahí si se acabó, entonces ya no se le hizo más ya, fiestas a la piedra, ni tampoco ya, la gente mismo ya no fue, porque el padre en lo sermones, decía que no hay que estar creyendo en esa piedra vieja, que tanta vaina, entonces así se acabó.


Entonces de ahí, algunos mayores no más, iban a ofrendar a la piedra, después ya quedó en la fe de cada cual, porque era muy bonito ahí, porque había unas piedras que estaban paradas y encima de esas, otras sentadas encima (dolmen/observatorio ancestral) del lado de arriba de la piedra, también había al frente de la piedra un plan, de llegar, sentar, un espacio de unos 8x8 m2  alrededor de la piedra, yo miré como llegaban los mayores a ofrecer (dejaban semillas, flores y las varas las ponían debajo de la piedra plancha (dolmen)). Entonces ahí al frente era una piedra en forma de triángulo (equilátero), y en el medio era una batea que se llenaba de agua, cuando llovía, entonces decían que esa agua era medicinal, y esa era para hacer los ritos, esa era para encomendar a los espíritus, estaba justo al frente de la piedra (no debajo), era planito, en forma de terraza (contrasta con la geometría de las terrazas de 1.5m alto x 8m de ancho) (…). 


Entonces, del lado de abajo, tenía una piedrita como ventanal (la una ventana miraba a la salida del sol y la otra por donde se oculta el sol), era como una mesa, entones, era, cuando el sol nacía del oriente, entraba ahí, cuando el sol estaba a medio día, topaba con la piedra del agua (triangular, de ceremonias), y cuando el sol se ocultaba en el occidente, también los rayos entraban por la otra ventana, pero más, más, bancos de piedra habían, era del lado de occidente, la entrada si era por el lado de encima de la piedra, porque del lado de abajo era muy pendiente, era un alto, por dónde llega el camino ahora, subía dando la vuelta desde la entrada a la explotación de la mina del lado de abajo, antes de llegar a la entrada de hoy, que sube desde la carretera, se subía, a la vuelta, a la vuelta, pero ahí encima ha tenido un plan, por eso los mayores decían, de norte a sur era que salía la constelación de la Cruz del Sur y de oriente a occidente salía el sol, para las fechas del 3 de mayo.


El 3 de mayo, se levantaban los mayores, y se iban a la piedra, a ver, pero eso era, sólo los que le creían a la piedra, peor que caiga, noche de luna menguante, pues era mucho mejor, clarito, entonces le llevaban las piedras de estacar el ganado, las ovejas,  el cacho lleno de hormigas, para el ganado y las ovejas, el cabresto de enlazar, el perrero de viajar, todo eso se ofrendaba la noche del 3 de mayo cuando subía la cruz del sur, también le llevaban semillas, y las dejaban ahí, a las dos noches, que era la menguante, sabían decir, la menguante blanca y la menguante que era malo para la tierra, la amarilla, sabían decir y para cualquier secreto era de ir ahí. Por eso, cuando algún chaman (autoridad espiritual), aprendiz, porque la piedra era para todo, entonces llegaba y se crucificaba (se ponía en forma de cruz), así de frente, al frente del sol, y para irse, se retiraba de frente, y cuando ya se daba la vuelta, ya no regresaba a ver.


Los músicos, tocaban el bombo, la flauta, se festejaba y se comía, y dejaban, eso, cuando era el día del 20 al 22 eso, dejaban ahí las semillas, para que recarguen energía, y protección. Solo cuando era la siembre de san Pedro, la de reyes, entonces, esa sí, iba, se las dejaba y al otro día, se las llevaba, las de san Pedro era a mitad de año, el 29 y las de reyes a inicio, porque antes solo se sembraba dos siembras, decían en los santos inocentes, las semillas de papas chinchiras (risas).


La piedra triángulo era de encima, era, alta, como una pilastra, y del lado de abajo, era otra, entonces la que ahora es dibujada el sol (Pasto), quedaba en la punta del triángulo, ahorita, sólo esta quedada, la punta, eran muchas piedras, del lado de abajo era la otra punta, también tenía dos piedras triangulares, era, el espacio de pasar el camino y de tras de esas piedras habían tres piedras, estaban abajo, en el camino, ahora que es la carretera, esa era la otra punta de triángulo que subía a la piedra, por eso estaba hecha como con dos triángulos, la piedra de los machines, ahí donde está, es solo la punta.


Mi papá José María decía, que mi papá abuelo (Sergio Misael Chinguad), había conocido cuando había venido de Ambato de la guerra de los mil días, que ya existió y de la venida de él, quedaron los paguayes, habían sido, 5 hermanos que había traído; mi abuelito había vivido aquí en Kamur, los papas de él. Él sabía ser muy creyente a la piedra, luego que se fue a vivir arriba a Guacaltud, cuando bajaba, me bajaba llevando, vamos me decía y llevaba los costales de semilla ya de noche, mi papá, tenía la creencia en las piedras, vamos a velar las piedras me decía, dos veces en el año era, para que los animales ricos no nos roben, decían que la piedra triangular era traída de la chorrera más alta, porque como era de lo más alto, el agua es más sana; el estiércol del caballo, oveja, y otros, todo ese es secreto, la estaca de ir a amarrar el caballo era diferente a la de la oveja y así.


Había un médico chaman (autoridad espiritual), de ahí de Tasmag, y cuando iba a la piedra, él no hacía la señal de la cruz, no se santiguaba, él tenía el bastón, cuando iba a hacer el ritual, hacía como tres huequitos, en forma de triángulo y colocaba el bastón en la mitad, y lo dejaba ahí, mientras se iba a orar (meditar) frente a la piedra (petroglifo de los machines), él dejaba el bastón de mando ahí, y la gente no se llevaba nada de lo que dejaban ahí, respetaban, había un gran respeto, es que la gente era como cerrada, o humilde, sencilla, no era como hoy se las dan de avispados y..., ya no respetan, los hijos ahora sólo dicen, ¿cómo estás? Y no más. Antes era de decir el bendito. Yo recibí muchos fuetazos, por no decir el bendito, de los mestizos, de los mayores indígenas, por no arrodillarme en un charco de agua, y ellos se quedaban a escuchar todo el bendito.


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Pai por leer.